Aislinn Derbez reflexionó sobre su faceta como madre, luego de que hace poco más de 5 años debutara en este terreno tras el nacimiento de Kailani, fruto de la relación que mantuvo con Mauricio Ochmann.
A pesar de que la actriz ha manifestado en anteriores ocasiones que la maternidad es de las mejores experiencias, esta vez se sinceró y habló de lo más complicado que ha vivido durante esta labor.
“Mi autoexigencia, definitivamente, como que sí me autoexijo demasiado, quiero ser demasiado perfecta, y cuando te autoexiges tanto, no lo disfrutas, creo que le tengo que bajar un poquito a mi autoexigencia, y simplemente atreverme a equivocarme”, explicó en entrevista para el programa Ventaneando.
La hija de Eugenio Derbez manifestó que ahora que ya es madre, ha entendido mejor lo que hicieron por ella sus progenitores, y reconoció que antes de esta etapa los criticaba mucho.
“Desde que soy mamá perdoné todo lo que juzgaba de mis papás, tanto de mi papá como de mi mamá, cosas que yo decía ‘nunca voy a terminar haciendo eso’, y claro que lo terminas haciendo, o sea, claro que la riegas igual o peor que los papás, terminas haciendo todo lo que dijiste que no ibas a hacer, entonces sí, lo que más le tengo a mis papás después de ser mamá es compasión y comprensión”, expuso.
Finalmente, la protagonista de cintas como A la mala y Macho, agradeció la excelente relación que mantiene con Mauricio Ochmann para sobrellevar de la mejor manera la tutela de su hija.
“Yo creo que la clave para mí fue ser esos papás separados que yo siempre hubiera querido tener, y que no pude tener, entonces ser ese ejemplo que a mi me hubiera encantado ver de niña. ¿Y sabes qué es increíble?, que tenemos esa libertad de ‘bueno, te la quedas tú un rato, unos días’, y entonces yo puedo hacer lo que se me pega la gana, me puedo ir de viaje, puedo trabajar, puedo hacer mil cosas, y al revés también, entonces esa parte de tener libertad absoluta, cuando estás en pareja no es tan fácil”, declaró.