Anne Hathaway lo confirmó de forma contundente. A través de una publicación en redes sociales, la actriz reveló su regreso como Andy Sachs en la tan esperada secuela de El diablo viste a la moda. La imagen muestra dos tacones rojos con forma de tridente sobre un fondo blanco, acompañados por la frase: “The Devil Wears Prada 2. Now in production”. El anuncio encendió las redes, generando una avalancha de reacciones entre seguidores y medios especializados, marcando oficialmente el comienzo de una nueva etapa para Runway y su universo.
El estreno está programado para el 1 de mayo de 2026. El rodaje comenzó el 30 de junio de 2025 y se desarrolla en locaciones clave del mundo de la moda: Nueva York, Milán y Roma. Aunque el adelanto no revela rostros, evoca con fuerza el cartel icónico de la cinta original, que en 2006 recaudó más de 326 millones de dólares y convirtió a Miranda Priestly en un emblema absoluto de elegancia, poder y control.
El elenco principal regresa casi por completo: Meryl Streep como la imponente Miranda Priestly, Anne Hathaway como Andy Sachs, Emily Blunt como la mordaz Emily Charlton, Stanley Tucci como el sofisticado Nigel Kipling, y Tracie Thoms como Lily. A ellos se suman nuevas figuras como Kenneth Branagh, quien interpretará al esposo de Miranda, además de Simone Ashley, Lucy Liu, Justin Theroux, BJ Novak, Pauline Chalamet, Helen J. Shen, Conrad Ricamora y Caleb Hearon.
La trama de esta nueva entrega girará en torno a la crisis de las publicaciones impresas y los esfuerzos de Miranda por mantener vigente la revista Runway. Emily, que ahora ocupa un cargo de alta dirección en un conglomerado de lujo, maneja los presupuestos de publicidad que Miranda necesita para sobrevivir. El nuevo enfrentamiento entre ambas promete ser mucho más nivelado, con una dinámica de poder distinta a la de la primera película.
La secuela cuenta nuevamente con la dirección de David Frankel y el guion de Aline Brosh McKenna, el mismo dúo creativo responsable de la exitosa entrega inicial. Aquella cinta se basó en el bestseller de Lauren Weisberger, quien se inspiró en su vivencia como asistente de Anna Wintour, la icónica directora de Vogue. El personaje de Miranda Priestly, con su temple gélido y su control absoluto del ámbito editorial, se transformó en una leyenda viva dentro del imaginario cultural global.
La publicación de Hathaway no solo da el banderazo de salida a la producción, sino que también define la atmósfera que rodeará esta nueva historia: sofisticación, audacia y una dosis precisa de nostalgia. En una época donde la moda se vive a través de algoritmos y pantallas, El diablo viste a la moda 2 se plantea como un duelo entre tradición e innovación. Y si esta primera imagen es una señal, Miranda todavía tiene mucho que decir.