Hasta el mismísimo James Bond se ha quedado de piedra, paralizado por el pirateo informático vivido en los estudios Sony.
Sony ha detenido sus producciones, la última consecuencia de este ataque hacker contra uno de los mayores estudios de Hollywood, según el diario The Times.
Entre las producciones paralizadas están la última cinta del espía al servicio de su majestad que el pasado 8 de diciembre comenzó a rodar bajo el título de Spectre.
O la próxima de Spider-Man, que se encuentra en la fase de pre producción. “Los encargados de las filmaciones de Sony han cancelado los rodajes porque los problemas (cibernéticos) les han incapacitado a la hora de procesar los pagos”, afirma el diario londinense sin dar el nombre de su fuente. La información hace referencia a terceras partes encargadas, entre otras producciones, del rodaje de Bond. Spectre tiene previsto su estreno el próximo noviembre.
Todavía no ha sido posible precisar quién está detrás de este ataque que, según la agencia Reuters, le podría costar al estudio más de 80,2 millones de euros. Además de su honra. Y la cabeza de su actual copresidenta de Sony Pictures, Amy Pascal.
El grupo agresor, autodenominado G.O.P o Guardianes de la Paz, ha filtrado desde el pasado 24 de noviembre datos personales de 47.000 trabajadores del estudio, una lista que incluye información privada de estrellas que han colaborado con Sony como Angelina Jolie, James Franco, Sylvester Stallone y hasta Beatriz, la nieta de la reina de Inglaterra.
Sueldos, historiales médicos, números de cuentas bancarias, de pasaportes, de identificaciones personales o fiscales.Una plétora de información privada ahora filtrada en la red que también incluye correos personales de muchos de sus ejecutivos. Una violación de lo que se cuece en esta gran empresa que está sacando a la luz todos su trapos sucios.
Como por ejemplo los comentarios desdeñando a Adam Sandler por su escaso éxito comercial, describiendo a Angelina Jolie como una “mimada de poco talento” con un “ego que campa a sus anchas” y cargados de racismo contra el actual presidente de los Estados Unidos, Barack Obama. Comentarios sacados de los correos electrónicos privados de importantes ejecutivos y productores de la empresa, incluida su copresidenta Amy Pascal.
El diario The Times no especifica el alcance de las supuestas suspensiones de los rodajes decididas por empresas afiliadas ante la imposibilidad de Sony de gestionar sus pagos. En Los Ángeles, los estudios Sony no han hecho ningún comentario al respecto. De confirmarse, el presupuesto de películas como el nuevo James Bond se encarecería considerablemente. Según la información filtradailegalmente desde el ataque hacker, el presupuesto de Spectre está ya en los 240,7 millones de euros lo que la convierte en una de las películas más caras de la historia.
Los ataques también han tenido consecuencias directas en otras películas. Títulos como la última cinta de Brad Pitt, Furia, o elremake del popular musical Annie han sido pirateadas y subidas a la red. Otras como la comedia romántica The Wedding Ringer que protagoniza Kevin Hart han retrasado su estreno hasta el próximo año. Lo mismo ha ocurrido con su presentación a la prensa, prevista para el sábado 13 de diciembre, y que ahora será en enero para evitar que Hart responda a preguntas delicadas sobre el caso.
El intérprete es descrito como “una puta” en uno de los correos electrónicos privados sacados a la luz estos días. Las preguntas de la prensa también brillaron por su ausencia durante la premiere de la películaLa entrevista, a la que sólo los fotógrafos fueron convidados.
Escrita y dirigida por Seth Rogen con James Franco como protagonista la cinta se encuentra en el centro de este ciberataque. Se han encontrado lazos que vinculan a Corea del Norte con este pirateo informático. Entre ellos la petición del grupo terrorista para que no se estrene La entrevista por estar centrado en un intento de la CIA de asesinar a Kim Jong Un, el líder norcoreano ridiculizado en la cinta.