La cantante y actriz Maribel Guardia continúa mostrando gran entereza y resignación tras el deceso de su único hijo, Julián Figueroa, quien falleció a los 27 años luego de sufrir un infarto agudo de miocardio y fibrilación ventricular en abril de 2023.
La costarricense compartió con distintos medios de comunicación lo que decidió pedirle a Los Reyes Magos este 6 de enero, además de los emotivos recuerdos que guarda de Julián en este día tan especial para los niños mexicanos y, aclaró si los rumores sobre que hará una fundación en nombre de su hijo son verdad.
“Lo que le pido siempre a los reyes es salud, con salud uno va por todo, por la actitud, por la alegría de vivir, dándole gracias a Dios, y luchando por todo lo demás, por el trabajo y por el amor, pero sin salud no se puede, la salud es todo, y salud mental”, expresó Guardia durante su arribo al aeropuerto de la Ciudad de México.
Acto seguido, Maribel contó: “Tengo recuerdos hermosos de mi Julián, le encantaban las espadas, le regalé muchas espadas, de verdad, de Toledo, entonces tengo una pared ahí, las tiene pegadas ahí en la pared. No, son espadas, digo de Toledo, pero no son de verdad, pero bueno, tantos recuerdos de mi hijo que me llenan el corazón y tantos motivos para seguir viviendo en nombre de todo lo que me dio Dios de tenerlo en mi vida, Dios no te dice hasta cuando son tus hijos, así que todos esos recuerdos que tengo de él, me van a acompañar por siempre”.
Posteriormente, la también presentadora aclaró que por ahora no tiene pensado hacer una asociación en nombre de su hijo, aunque manifestó que sí continuará con las acciones que realizaba el joven cantante antes de su deceso.
“Julián siempre hizo obras de caridad y me inspiro mucho en él porque él ayudaba a los niños con cáncer, cantaba para las señoras que las iban a operar, y eso recibí mucho cuando él murió, de gente dándome las gracias. ‘Me operé por Julián, porque él recaudaba fondos con las canciones’. Entonces mantener eso en nombre de él y pues seguir dando todo lo que se pueda”, subrayó.
Previo a estas confesiones, Maribel Guardia reveló que las fiestas de fin de año tienen un significado distinto tras la partida física de Julián Figueroa.
“Rezo por mi hijo, lloro, pero son lágrimas diferentes al 31, es un día muy fuerte, muy, muy fuerte, yo la verdad sí estaba feliz de estar trabajando, de estar subida en un escenario. Sé que a Julián le gustaría que yo estuviera ahí, porque a él también le encantaba cantar y trabajar. El año pasado fue un año durísimo, el 31 fue horrible, y va a ser así siempre (…) es muy duro, siempre hay que estarse con estas pérdidas levantando y ayudándote con Dios a seguir adelante, no es fácil, entonces, sí, la verdad que prefiero, preferí trabajar”, declaró.
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