Con una exquisita mezcla de juventud y experiencia, de talento, mucho talento, de pianos, violines, de danza y la música de Kozeluch, Opel y Rachmaninoff, celebró el Dúo Petrof, el viernes por la noche en el Teatro Universitario, sus primeros quince años de vida.
Ante un público que celebró todas las propuestas artísticas mostradas en el escenario, Vlada Vassilieva y Anatoly Zatin, integrantes del Dúo Petrof, ofrecieron el “Concierto para cuatro manos y orquesta” de Leopold Kozeluch, acompañados por el Ensamble de Cuerdas del Instituto Universitario de Bellas Artes (IUBA), que dirige Tatiana Zatina y que en esta ocasión tuvo como director invitado al joven José Eduardo Alarcón Núñez, egresado de de la misma Universidad de Colima.
Ofrecieron también “Dilukkenjon”, de Doug Opel, al lado de Univerdanza, compañía de la UdeC que dirigen Adriana León y Alejandro Vera, quienes danzaron alrededor y frente a los pianos junto a los bailarines Arturo Bastar, Majo Bastidas y Ángel Torres.
En la segunda parte del concierto, el Dúo Petrof deleitó al público con la Suite No. 2, Opertura 17, para dos manos, de su amado Sergei Rachmaninoff. A esta pieza siguieron “Rondó para dos pianos, ocho manos”, de Bedrich Smetana; “Danza Eslava” Op. 46, No. 6 y No. 8, para ocho manos, de Antonin Dvorak y “Galop”, marche a ocho manos, de Albert Lavignac.
En estas últimas cuatro piezas, el Dúo Petrof estuvo acompañado por Luciana Muraira y Saúl Ibarra, dos jóvenes de la licenciatura en Música del IUBA, alumnos suyos, que han ganado múltiples premios.
En la ceremonia final, luego de recibir los aplausos y los ramos de flores, Priscilia Álvarez Gutiérrez, en representación del rector José Eduardo Hernández Nava, felicitó al Dúo Petrof por sus quince años y dijo que “es realmente un privilegio asistir a un concierto de esta calidad, con artistas que se han presentado con éxito en lugares de prestigio de México, Estados Unidos y Europa”.
Del Dúo Petrof, aseguró que “es un proyecto ambicioso que cada año se consolida no sólo de manera artística, sino en la memoria y afectos de los universitarios y los colimenses, y que se distingue por su alta calidad interpretativa y sus originales propuestas artísticas”.
Destacó que, además de dedicarse a su propia carrera, se den tiempo para formar, con calidad, a las nuevas generaciones músicos. La UdeC, añadió, es una institución reconocida por su calidad académica e investigación, “pero también es el espacio desde el cual se crean, fomentan y difunden toda clase de manifestaciones artísticas y culturales que trascienden las fronteras de la propia institución, lo que nos permite influir de manera importante en el desarrollo del estado”.
Por último, agradeció a los artistas que ofrecieron este concierto de aniversario, “por regalarnos esta velada tan intensa y entrañable y por hacer de nuestra Universidad un lugar desde donde es posible aprender y disfrutar el arte en su más alta expresión. Felicidades por estos quince años y gracias por permitirnos disfrutar de su talento; son un orgullo para la comunidad universitaria”.
En representación del gobernador José Ignacio Peralta Sánchez asistió Carlos Ramírez Vuelvas, secretario de Cultura, quien afirmó que el Dúo Petrof ya forma parte de la cultura de los colimenses gracias a tres aportes fundamentales: el fortalecimiento y la consolidación que le han dado al programa académico de la UdeC, “que se puede constatar en los estudiantes que esta noche los acompañaron y que se conforma con los premios que acumulan sus alumnos más jóvenes”.
El segundo aporte, dijo, es su vocación académica, pues no sólo forman estudiantes, sino que también preservan y rescatan la tradición musical, “como lo hicieron en la primera pieza de su programa de quince años, y que también se constata en la selección de piezas de este maravilloso programa”.
Por último, destacó como tercer aporte las características de interpretación del Dúo Petrof, “que se expresan en el vigor, la fuerza y el dinamismo que particularmente ha puesto el doctor Anatoly en sus arreglos y composiciones, como su famosa versión del ‘Jarabe Tapatío’. Por ello, y desde nuestros corazones, los colimenses nos sentimos orgullososo de contarlos entre los nuestros”.