La vida de Inés Gómez Mont y su esposo Víctor Álvarez Puga dio un giro inesperado el pasado 10 de septiembre, día en que las autoridades mexicanas giraron una orden de aprehensión en su contra por el presunto delito de peculado y operaciones con recursos públicos.
A pesar de que Inés y su marido se encuentran prófugos de la justicia y existe una orden de localización y captura en más de 150 países, Gómez Mont sigue acaparando los titulares de medio artístico debido a la vida de lujos que llevaba, pues además de lucir diversa ropa y bolsos de diseñador, valuados en 500 mil dólares, también se descubrió que es dueña de millonarias mansiones.
En esta ocasión, Inés volvió a ponerse en la mira de la opinión pública después de que una publicación diera a conocer que, días antes de que se girara su orden de captura, compró una lujosa residencia en Estados Unidos.
De acuerdo con la revista, la residencia que adquirió la presentadora de televisión se ubica en Rolling Road, en Villa Pinecrest, Florida.
Asimismo, una amiga de Gómez reveló que la casa tiene un valor cercano a los 126 millones de pesos pues tiene diversos lujos que la vuelven única, además de ser una de las más ostentosas de la zona.
“Sí, la adquirieron días antes de que se les girara la orden de aprehensión. Inés inició las negociaciones en abril, pero la compra quedó cerrada en agosto; no la puso a su nombre, sino al de una empresa que creó en Florida, llamada Casa Mía; aún así, sí firmó los papeles”, detalló la fuente.
Al respecto de los detalles de dicha mansión, la íntima de Inés contó: “Tiene una extensión de casi mil metros cuadrados, siete habitaciones, ocho baños completos, gimnasio, piscina, grandes jardines y un teatro para 18 personas con sonido envolvente e iluminación”.
Y agregó: “Son dos niveles, pero tiene ascensor, además dos cuartos de servicio y un garaje en el que caben hasta siete autos. Está increíble; la decoración es de lujo, tiene candiles de cristal, paredes y pisos de mármol, los baños son enormes y la habitación principal mide 150 m2, casi lo que mide un departamento de lujo”.
Por si esta propiedad fuera poco, la amiga de la artista aseguró que además de este inmueble, Inés tiene propiedades en la Ciudad de México, una casa en Acapulco, otra en San Miguel de Allende y varias en Estados Unidos. “Sí, justo antes del escándalo compraron una en Isla de la Gorce, Miami; un depa en Nueva York; y ahora aparece esta residencia en Pinecrest, Florida”, detalló.
Finalmente, la persona manifestó que todas estas posesiones las adquirió para tenerlas a disponibilidad de su familia o amigos cuando viajan, por lo que descarta que puedan estar viviendo en alguna de ellas. “Digamos que son como casas de descanso”, aseguró.